Y entonces se encuentran.

Nueva York. Grande, vigorosa. Edificios que se desdibujan entre nubes, luces de farolas que comienzan a desvanecerse con los primeros rayos de sol. Un cambio de imagen, una nueva expresión, la misma actitud desdeñosa con todo el que se cruce en su destino. La señorita Evans abriéndose camino en el albor de un nuevo día.

Nueva York. Alta, imponente. Calles interminables, mapas inteligibles, una mañana que se presenta agitada. Un lugar completamente distinto, necesidad de un cambio instantáneo. Irene peleándose con la guía de bolsillo, sintiéndose cada vez más pequeña.

Las dos siguen un rumbo fijo. La una impasible, la otra exasperada. Caminando sin ver, caminando sin mirar. Y entonces se encuentran. Un choque, un quejido, una protesta.

― ¿Pero qué haces? ¡Mira por dónde vas!

―Lo siento. No sabía…

― ¡Por supuesto que no! ¡Turista tenías que ser!

Y se alejan, prosiguiendo su camino. La una exasperada, la otra indignada – y aún más perdida si cabe. Sin saber que las dos tienen mucho en común, sin saber que comparten un mismo temor. Y se alejan, cada vez más, sabiendo -con esa extraña certeza que envuelve a los desconocidos- que jamás volverán a encontrarse.

39 comentarios:

José Luis López Recio dijo...

¡Muy bueno! Breve y genial.
Un abrazo guapa.

leoriginaldisaster dijo...

un placer leerte!no me cansare de decirtelo:)
abrazos!

Laura Ferreri dijo...

que bueno, que bueno... y que alegria haber encontrado tu blog!

Dara dijo...

Hay tanta gente que se cruza y aunque no vuelve a verse jamás tiene tanto en común...


miau
de
rosquilla
con
azúcar
glass

rOo RAMONE dijo...

Tal vez el jamás miente un poco
y exista un futuro cercano :)

Un beso guapísima!!
Bonitaaa semanaa para ti :D
//Texto gigantee como siempre//

Anónimo dijo...

¡¡¡Qué buenísssssssssimo relato!!!

Una idignada, la otra exasperada... ¿cuántas veces a lo largo de cada día nos cruzaremos con alguien a quien tal vez jamás volvamos a ver? Jejeje... me has dejado filosofando, a primerísima hora de la mañana...

Besos, mi niña.

Susi DelaTorre dijo...

Dá vértigo, verdad? Dos desconocidas que se encuentran, en medio de una ciudad masificada e inhumana, y que tienen en común trozos de vida, de inseguridades, y...
siguen sin percatarse de eso, sin mirarse realmente...

Cuántas veces habrá pasado!

Besos, Marta!!

Ela dijo...

lindo!

Mirna Macondo dijo...

Yo también pienso mucho en ello, en cuando piso sin querer a alguien en el bus y me giro para pedirle perdón. Esa persona me sonríe a modo de disculpa o me dice un rápido "Nada".
Y me quedo pensando eso un rato hasta que yo o él nos bajamos del bus.
Y después desaparece de mi mente...
Luciérnagas en Marte
Mirna

Belén dijo...

Ohhhhh!!!!

Si es que hay que estar más atento a lo que ocurre fuera, no dentro de cada uno!

Besicos

Étoile dijo...

O quizás si, quizás la vida las lleve al mismo puerto, aunque sea dentro de veinte años y ninguna se acuerde :)

.un muáh de rascacielos alto, alto alto ;]

mimi dijo...

Marta.. eres tán magica, penetras tanto en el corazón de cada uno..

Es cierto, a veces chocamos sin saber con otras personas y cuando nos separamos sentimos esa extraña sensacion de no lo volveré a ver nunca más.


Genial esta entrada..
besos
:)(L)

Recomenzar dijo...

Muy lindo tu blog Normalmente cada mes busco 5 blogs nuevos para compartir las letras El tuyo me ha gustado besos

HUMO dijo...

Precioso, talentosa Marta, lamento no pasar mas seguido.

besos!

=) HUMO

Anónimo dijo...

fue un agrado leerlo, es habil en gestos imaginados y situaciones planteadas, me gusta.^^
cuidate

El delineante de cumulonimbos enterrados dijo...

Mejor que encontrarse con la certeza es encontrarse con un desconocido incierto.

Saludos subterráneos.

Paula dijo...

Me encantaría perderme en NY.. Y sí, nos chocamos continuamente con otra gente y todo queda en .. "lo siento".. y se va, y quien sabe, a lo mejor es tu alma gemela.

un besazo !

Laura Sánchez dijo...

A veces me paro a mirar cada rostro que veo pasar por la calle, pensando que no volveré a verlos, quizás. Y es extraño, a la par de bonito, porque te hace recordar que los extraños son como los segundos.

Un besito, Marta :)

Unknown dijo...

Muchísimas veces nos habrá pasado a nosotros. No podemos hacernos cargo de la cantidad de gente con la que nos cruzamos cada día.

Mirar a los ojos a la gente por la calle es como pedir permiso para entrar en su vida durante unos instantes. A veces el permiso se extiende un poco más... ^^

Anónimo dijo...

Irene y Sarah... jamas las hubiera imaginado en un mismo lugar

Anónimo dijo...

Me ha encantado.

Blaueta dijo...

genialísima :)

Ameel dijo...

Madame, es usted una maestra de las palabras.

La sonrisa de Hiperion dijo...

"La una exasperada, la otra indignada – y aún más perdida si cabe. "


Cortito pero buenísimo, me ha encantadoo en esta luminosa mañana de domingo...

saludos y un besazo!

Edu dijo...

Nueva York, con ojos de Lorca, es como a mi me gusta visitarla. La vida es como la linea de metro, no sabemos el vagon, ni la compañia de el, en nuestro viaje a la salida de el.
Un Saludo

OjosMiel. dijo...

Y pensar que una de esas grandes personas de nuestra vida puede encontrarse entre esa muchedumbre...

Shadow dijo...

Se puede estar perdido sin dejar de tener claro el destino que deben seguir tus pies..
En fin, ¿qué decir que no te hayan dicho otros antes que yo?
Palabras bellas, bien hiladas y muy humanas... Vamos, que leerte es una delicia para los sentidos ;)
Un beso
Carlos

Anaid Sobel dijo...

y algo tan común tan importante... dos desconocidas que si dejaran de serlo llegarían a algo maravilloso... pero saben que no sucederà.

pájaro pequeño dijo...

qué lindo eso que escribiste.
me gustó muchisimo.
como siempre!

AAN dijo...

¿Te gustó NY? ;). Miss U

cora dijo...

Los desconocidos y el misterio. Hay cosas que nunca cabremos de los demás, aunque se parezcan mucho a nosotros.

Anónimo dijo...

tan tú!

Vanille Galaxy dijo...

A mí me gusta NY, por algo soy La zorra de Nueva York. Y me gusta tu blog y la gente que mira sin ver por dónde va :)

muás!

P dijo...

Todos los días (o casi todos) nos cruzamos con gente a la que nunca volveremos a ver, y en algunos casos es una pena porque ves a alguien que tiene algo diferente... y luego ya no está.
Me ha gustado tu blog :) Seguiré pasando ahora que he vuelto al mío, un beso!

Leei. dijo...

Es una parte de un todo o es una parte que deja lugar a la imaginación?
:) Me gusta.
¿Sabes? Alguna vez yo también em he parado a pensar como serán los desconocidos con los que me cruzo, si alguno de ellos podría llegar a ser uno de mis mejores amigos o algo similar, y en cambio no le conozco de nada. Cosas raras que dan tiempo a pensar en viajes muy largos.

Sílvia dijo...

las miradas que se cruzan y se camuflan

Lía dijo...

Cada día me gustan más tus palabras... =)

Miles de besos!

P.d. Tienes que ver la película, es demasiado especial.

Fernando García Pañeda dijo...

Las trampas del azar enroscadas con los sueños.
¿Jamás?
Un beso, Marta.
P.D. Piensa en historias entre batallas y Reyes Católicos ;)

Erik Cohen dijo...

Hay historias que solo las permite Nueva york.:D